Lamentaciones 3:22-23
Las misericordias del Señor jamás terminan, nunca fallan sus bondades. Nuevas son cada mañana; grande es tu fidelidad.
Hoy amanece un nuevo día, es una oportunidad más de experimentar la fidelidad de Dios para contigo.
Tú decides si éste va a ser un día gris, atareado, de afanes, temores y conflictos o si va a ser un día donde la fidelidad de Dios se manifestará en ti, sosteniéndote y afirmándote. La promesa está dada, solo se requiere quien la crea y la reciba.